
Una de las mujeres acusadas del crimen con saña en el municipio de Cholul, donde un velador fue asesinado a machetazos, se encuentra hospitalizada y su proceso judicial ha quedado en pausa.
De las cuatro personas detenidas por su presunta participación en el crimen, sólo los dos hombres fueron imputados por el delito de homicidio calificado y una de las mujeres recuperó su libertad.
La noche del pasado 13 de octubre un guardia de seguridad de la residencial «Gran Valle» fue asesinado a machetazos, supuestamente por acosar a una de las mujeres que participó en el homicidio.
El hijo de la víctima observó la agresión y con su ayuda se logró la captura de cuatro personas –dos hombres y dos mujeres–, que fueron presentadas de manera oficial al día siguiente.
La instigadora del crimen, Susana Virginia B. C., de 29 años de edad, oriunda de Baja California, se encuentra en calidad de detenida en el Hospital Agustín O’Horán, donde se le atiende de una complicación de salud.
Hasta el momento ella es acusada de incitar a los varones de matar al velador, pero no se ha fijado fecha y hora para su audiencia al estar hospitalizada.
La otra mujer, paisana de la instigadora y quien también fue detenida el día de los hechos, recuperó su libertad al establecerse que no tuvo participación directa en el delito.
Mientras tanto Camerino R. R. y José A. Z., de 37 y 31 años de edad, ambos originarios de Michoacán, fueron imputados por la Fiscalía General del Estado y permanecerán bajo prisión preventiva oficiosa.

Hoy se informó que José Aldemar K.N., de 66 años, murió a causa de anemia aguda postraumática secundaria a herida de arma blanca.
El ataque se dio, al parecer, porque el sexagenario acosaba a una de las mujeres, que a su vez azuzó a los sujetos cuando se encontraban drogados y alcoholizados.
Cuando José Aldemar y su hijo J. A. K. B., de 15 años de edad, se encontraban en la vivienda donde laboran como veladores, fueron agredidos verbalmente por los sujetos que estaban embriagándose en una casa aledaña.
Los sujetos aprovecharon que el velador, en su desesperación, perdió el equilibrio y cayó al piso, donde le dieron de machetazos en las piernas y prácticamente se las cercenaron.
El adolescente se salvó porque corrió, pero sufrió una mordida en el brazo por parte de una de las mujeres. Posteriormente llamó a las autoridades y se logró la captura de las cuatro personas.