Un fuerte operativo con efectivos del Ejército y la Policía Federal se realiza desde anoche en la calle 88-A por 65 del centro de Mérida, en el segundo cuadro de la ciudad.
Agentes federales y estatales de la SSP realizan la acción con la presencia de perros y drones, mientras dos cuadras a la redonda se encuentran sitiadas desde ayer, entre la avenida Itzaes y las vías del tren.
Aunque se ha especulado que el amplio operativo obedece a la presunta existencia de drogas en el lugar, hasta el momento ninguna autoridad ha querido informar sobre los motivos de la fuerte movilización.
Una bodega que tiene amplio portón sobre la calle 88-A se mantiene bajo vigilancia de elementos militares y policías federales fuertemente armados.
En el lugar PRESIDIO pudo corroborar que se trata de un viejo almacén con basura y desechos de cientos de computadoras, impresoras y copiadoras, entre otros aparatos electrónicos.
Los materiales de desecho en la bodega hacen presumir que es propiedad de algún zar de la piratería en Yucatán y en dicho lugar se depositan aparatos que en su momento fueron utilizados para la clonación de películas y discos musicales.
Anoche, alrededor de las 19:30 horas, llegó un primer escuadrón de fuerzas armadas junto con perros especializados en la detección de sustancias ilegales frente a un amplio portón blanco donde se lee “Recicle Scap Digital” y confirmaron que el predio tiene un acceso posterior.
Los militares elevaron drones para grabar videos del interior de la bodega, de la cual PRESIDIO compartió un panorama general con nuestros lectores, mientras los agentes apostados afuera esperan la orden de un juez para ingresar.
En el interior, además de la basura electrónica, se observa una báscula para tráileres y un vehículo utilitario con placas de Yucatán.
Se averiguó que sería el juez Luis Mugarte quien expida la orden de cateo para poder ingresar al domicilio y confirmar o descartar la presencia de narcóticos.
PRESIDIO pudo averiguar que desde temprana hora de hoy lunes, al lugar llegaron dos jóvenes a bordo de una motocicleta y que son trabajadores de la recicladora. Trascendió que uno de ellos es hijo del dueño del lugar y que fue detenido.
Vecinos relataron que desde hace tres días, durante las noches, un tráiler con caja cerrada ingresó al predio, lo que incluso perjudicó el tránsito vehicular.
Dijeron que el fuerte ruido del motor llamó la atención y observaron desde lejos el movimiento, pero no se dieron cuenta en qué momento la pesada unidad se retiró del lugar.
Se averiguó que el almacén pertenece o fue propiedad de un hombre de apellido Pino, el cual podría haberlo dado en renta.
Testigos que viven en la zona señalaron que todos los días llega un muchacho al lugar, pero nunca abre el portón. “Siempre entra por una pequeña puerta y vuelve a cerrar”.
Hoy el joven llegó al sitio pero se negó a dar acceso al lugar, de modo que fue detenido.
Aunque circuló una versión de que en el sitio se almacenaba pepino de mar, esto pareció descartarse tras una observación directa, pues no se encontraron neveras para conservar el producto del mar.
El sitio tiene sendos montículos de computadoras antiguas e inservibles, igual que una pequeña caseta con apariencia de abandono, pero junto había estacionada una camioneta en buen estado, de modelo reciente.
Militares y policías se mantienen venciendo el calor y el sueño en espera de la orden de cateo, pero admitieron que ésta podría demorarse hasta tres días en ser expedida.