Atendiendo quejas de vecinos, el Ayuntamiento de Mérida realizó ayer un operativo en el fraccionamiento Residencial San Carlos para retirar puestos de comida que operaban sin permiso en la vía pública.
La intervención fue encabezada por la Subdirección de Establecimientos Fijos, Semifijos y Ambulantaje, con énfasis en la intersección de las avenidas Correa Rachó y Cámara de Comercio, donde se retiraron cuatro estructuras y se aseguraron dos más.
Los puestos retirados, incluyendo fijos, semifijos y “foodtrucks”, obstruían el paso peatonal y provocaban conflictos de tránsito.

“Estamos conscientes de la necesidad que tienen algunos ciudadanos de trabajar; sin embargo, como lo ha señalado la alcaldesa, Cecilia Patrón Laviada, es importante que lo hagan en orden, pero sobre todo manteniendo la seguridad para peatones, automovilistas y los mismos comerciantes”, señaló Alfonso Lozano Poveda.
Gracias al operativo se logró mejorar la circulación vehicular en la Glorieta de las Haciendas, una zona con alto flujo.
Vecinos agradecieron la acción, pues los puestos aparentemente atraían fauna nociva y generaban estacionamiento en doble o triple fila.
El operativo continuó en la zona de la Clínica Star Médica, en el Fraccionamiento Altabrisa, donde se notificó a seis vendedores para retirarse de la calle 26 entre 7 y 15.
En La Florida, también se notificó al dueño de un remolque de comida en la calle 30, entre 21 y 23.
“Queremos que la venta en la vía pública sea segura y ordenada. Los comerciantes deben retirar sus estructuras y limpiar el área al finalizar su jornada”, añadió Lozano Poveda.

Se verificaron también las condiciones de seguridad, como el uso adecuado de tanques de gas menores a diez kilos, cables eléctricos reforzados y la presencia de extintores en buen estado.
La Subdirección continuará realizando inspecciones para garantizar que se cumplan los lineamientos establecidos.
El Ayuntamiento reafirmó su compromiso de mantener el orden y la seguridad en los espacios públicos.