Braulio Luna Sánchez, de 18 años de edad, fue imputado esta tarde por el delito de homicidio simple por el juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero.
Como dimos a conocer en días pasados, este joven originario de Veracruz es el asesino del promotor artístico Sergio Serrano Navarro, también conocido como “Sergio Serranova”.
El juez Mugarte Guerrero le decretó la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa por todo el tiempo que dure el proceso y estableció que la audiencia de vinculación se efectúe el próximo día 27.
Llama la atención que la carpeta de investigación 388/2019 se manejó “sin detenido” y que fue clasificada por la Fiscalía General del Estado como “homicidio por riña”, que sólo se castiga con 4 a 12 años de cárcel.
Sin embargo, Mugarte Guerrero reclasificó el delito a homicidio simple por el cual, de resultar Luna Sánchez responsable de éste, se le impondrán de 10 a 15 años de prisión, de acuerdo con el artículo 372 del Código Penal del Estado.
El imputado en su declaración confirmó lo publicado por PRESIDIO el pasado 17: que conoció al ahora occiso cuando trabajaba como mesero en el bar “Mictlán” y que comenzaron a salir.
Dijo que Serrano Navarro le pagaba 600 pesos por dejarse practicar sexo oral en su casa y que eran frecuentes sus encuentros.
Asimismo que el 5 de diciembre se vieron en casa del empresario en el fraccionamiento Francisco de Montejo, donde sostuvieron sexo oral a cambio de dinero.
Sin embargo, según declaró, en un momento dado “Serranova” quiso que lo penetren y como sabía que “padecía de una enfermedad contagiosa” se negó, lo que propició que empezaran a pelear.
En un momento dado, dijo, el ahora occiso tomó un cuchillo y lo lesionó en las manos y que al reaccionar al ataque, lo despojó del arma y lo acuchilló en 26 ocasiones.
Luego de ello, pidió el servicio de un taxi de la plataforma Didi, a cuyo conductor le solicitó lo llevara a una farmacia de “Similares” para que lo curen.
En este lugar le brindaron los primeros auxilios y que, por la gravedad de sus lesiones, le indicaron que busque una mejor atención.
Por tal motivo llamó a su mamá –al parecer su madrastra- y se vieron en la Clínica Pensiones, donde les pareció muy caros los servicios médicos y fueron al Hospital O’Horán.
Allá estuvo internado por siete u ocho días, por una supuesta cirugía que le practicaron, y bajo custodia de la Policía Estatal de Investigación, como publicamos.
Sin embargo, al darse de alta le fue retirada dicha custodia, inexplicablemente, y se refugió en casa de su abuela, en el fraccionamiento Vergel.
Su versión fue contrastada con las entrevistas al chofer de la plataforma Didi, de un vecino, del amigo que descubrió el cadáver el día 7 en un charco de sangre e incluso con las grabaciones de las cámaras de seguridad de una vivienda cercana, con lo que se pudo localizar al conductor del servicio de taxi.
Este testigo declaró que Braulio Luna subió tres maletas cargadas con pertenencias que sustrajo de la casa, a la cual llegó sin nada, e incluso ayudó a subirlas al automóvil Ford Figo que manejaba.
Del domicilio de Serrano Navarro, en Francisco de Montejo, lo llevó a una casa en Ciudad Caucel y de ahí a Similares.
El testimonio del conductor de Didi, que consta en la carpeta de investigación, sería clave para incriminar al homicida, aunque en su integración presuntamente hubo anomalías que podrían facilitar su salida de prisión.