–Personal de la PEI visitó predios particulares para solicitar memorias de videocámaras y las devolvieron en blanco

#MÉRIDA La Policía Estatal de Investigación (PEI) borró las grabaciones de cámaras particulares que estaban en el trayecto por donde fue conducido un automóvil involucrado en un doble crimen.
Ayer informamos del hallazgo de un Chevrolet Beat de color rojo que estaba calcinado y que fue sustraído de un predio en la colonia San Damián donde fueron asesinadas dos personas.
Los autores del doble crimen se fueron manejando el vehículo hasta un terreno baldío del gobierno del estado en el fraccionamiento Diamante y le prendieron fuego antes de abandonarlo.
Su trayecto presuntamente quedó registrado en las cámaras de la Secretaría de Seguridad Pública de Yucatán, lo cual no se ha dado a conocer debido a las investigaciones que están en curso.
Sin embargo, personal de la PEI, que opera bajo las órdenes de la SSP, rastreó los domicilios con videocámaras que estuvieron en el trayecto del automóvil con los homicidas a bordo.
Los agentes estatales al mando de Carlos Eduardo Flores Moo estuvieron visitando esos predios frente a los cuales pasó la unidad, principalmente los ubicados en avenidas.
Al parecer se alcanzaba a ver sus rostros en algunas grabaciones de alta calidad.
Según testimonios recogidos por PRESIDIO, agentes de la Policía Estatal llegaron a sus casas y, de manera amable, pidieron a sus propietarios proporcionar la memoria con las grabaciones para las investigaciones.
Sin embargo, los vecinos denunciaron que todo fue borrado.
Un testigo informó a PRESIDIO –bajo condición de no revelar su identidad, por “miedo a la Policía”- que se llevaron la memoria con las grabaciones y se la devolvieron en blanco.
“Se me hizo extraño que me digan que estaba en blanco la memoria, cuando revisé que tenía archivos”, dijo una persona que vive en la zona de Tixcacal y Paseos de Opichén.
Según le comentaron “los de la Fiscalía”, no había nada grabado. Presuntamente en esa grabación podían apreciarse los rostros de los tripulantes del Beat.
Se pudo averiguar que los agentes de la PEI acudieron también a la tienda Oxxo cercana para checar sus cámaras, pero al constatar que por ahí no pasó el auto, no fue necesario solicitar la memoria.
Un nuevo dato llama la atención: los vecinos del terreno de la Japay vieron el auto en llamas la madrugada del domingo y fueron ellos mismos que llamaron a los servicios de emergencia para reportarlo, contrario a la versión de que la autoridad localizó el auto con base en su investigación.
A ellos los agentes mostraron fotos con el auto moviéndose en diferentes puntos del poniente.
Asimismo en las casas cercanas al doble homicidio en la colonia San Damián, a cuyos ocupantes también solicitaron las memorias con las grabaciones, se dijo que casualmente anteanoche lunes no escucharon música, como cada semana en que los ahora occisos realizaban sus reuniones.
La autoridad también dio a conocer hoy, de manera extraoficial, que ambos cuerpos tenían varios días sin vida, pero en las casas contiguas no sintieron el olor característico a descomposición.
Según la autopsia, el arma usada en ambas muertes fue un cuchillo. Al sujeto de 40-45 años de edad lo atacaron por la espalda y el arma perforó uno de sus pulmones, tras lo cual murió desangrado.
El otro, de alrededor de 60 años, fue degollado con otro cuchillo y su cuello quedó cercenado a la altura de la carótida izquierda, tras lo cual perdió sangre de manera acelerada.
Ambas heridas fueron certeras y los cortes realizados con precisión, aunque también se hallaron golpes en ambos cuerpos.
Cabe mencionar que la Fiscalía General del Estado, que continúa acéfala tras la renuncia de su titular –por severas diferencias con el titular de la SSP, Luis Felipe Saidén Ojeda, por la forma en que éste pretendía manejar las investigaciones de alto impacto- dijo hoy que ambos fallecidos están en calidad de “desconocidos”.
Lo misterioso es que ayer, afuera del domicilio de la calle 9 por 30 y 32 de San Damián, estuvieron los familiares de los dos sujetos asesinados, que identificaron plenamente la casa de sus parientes, al igual que el vecino que vio ambos cuerpos, uno de ellos del señor Manuel Meza Martínez.
Asimismo la dependencia estatal dio a conocer que el Chevrolet Beat sustraído y calcinado “no está identificado” y que se desconoce a quién pertenece.