Matías tiene apenas cuatro años y sueña con correr tras un balón y patearlo, lo que por el momento no puede hacer porque padece una enfermedad motriz.
Sin embargo, Matías podría estar muy cerca de cumplir su sueño gracias al apoyo que recibe del DIF de Kanasín para ser atendido en un Centro de Atención Múltiple.
Él padece mielinomeningocele, una enfermedad que se caracteriza por la salida de la médula espinal y las membranas que la recubren a través de una abertura en la columna vertebral.
No obstante, eso no le impide soñar. Aunque se mueve despacio gracias a un ‘burrito’, Matías se ha sabido ganar el cariño de todos los que lo rodean
Matías el más pequeño de los 94 niños que son atendidos en el DIF de Kanasín con capacidades especiales.
Los infantes reciben todo tipo de apoyos, señaló su directora Carolina Rosado Sánchez, quien dijo que los 94 niños perciben las ayudas durante todo el año, por parte del DIF de Kanasín.
“En esta dependencia atendemos a niños con capacidades diferentes, síndrome de dawn, con autismo, parálisis cerebral, trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), discapacidad auditiva y discapacidad motriz, entre otras”, señaló Karla Chan Aké, coordinadora de enlace ciudadano.
Chan Aké dijo que cada niño es diferente al igual que la atención y durante todo el año se les apoya con transporte para acudir a los diferentes Centros de Atención Múltiple (CAM).
A los niños y sus padres se les pasa a buscar en un punto estratégico, de acuerdo con la directora Rosado Sánchez.
Posteriormente, se les traslada a su respectiva escuela. Allí se les deja y se pasa a buscarlos después, acompañados por personal de la dependencia municipal.
Añadió que se han abierto diversas rutas para pasar a buscar al pequeño, las cuales son:
- El Dorado
- Pancho Villa
- Flor de Mayo
- San Pedro Nohpat
Comentó que en la administración del Alcalde Edwin Bojórquez se ampliaron las rutas y el número de niños atendidos.
También, apuntó que el DIF es el puente de enlace para diferentes dependencias y se realiza la gestión para que el niño pueda acudir en la mañana o en la tarde al CAM donde haya cupo.
El traslado impacta en la economía familiar ya que hay muchos padres y madres que no pueden llevar a los niños hasta Mérida.
Por ello, los inscriben al DIF que se encarga de hacer esa labor y se lleva y trae al niño hasta el punto estratégico.
De acuerdo con la entrevistada, hay grupo de papás que están al pendiente de todos los programas como el de equipos de movilidad, aparatos auditivos y apoyo de medicamentos.
“Nosotros somos un vínculo para poder orientar y canalizar a las diferentes instituciones”, añadió.
Según la directora, en el DIF, los niños también participan en sus cursos de verano donde aprenden lo básico de la repostería y también aprenden a hacer piñatas.
En el último día, se les lleva al Centenario o algún otro sitio para entretenimiento. También participan en el carnaval y en otras actividades a las que son convocados.